Lo más importante para mantener la frescura de tus alimentos es tener siempre la temperatura perfecta. Ajusta la temperatura en el nivel que te indique el manual. También, recuerda que los estantes inferiores estarán más fríos que los superiores. Es por eso que te recomendamos utilizar los estantes superiores para los productos que consumirás pronto como la comida preparada.
¿No estás seguro de cómo mantener la frescura de tus alimentos? Te recomendamos colocar lácteos, carnes frías y otros alimentos perecederos en las parrillas más bajas de tu refrigerador para mantenerlos lo más fríos posible.
Además, no cortes la carne antes de cocinarla, ya que esto acelera el deterioro. Coloca la carne en contenedores de vidrio o plástico para evitar que se derrame en otros alimentos.
Productos lácteos como leche, yogurt y queso cottage también deben estar almacenados en los estantes inferiores, te recomendamos colocar la leche hasta el fondo.
La mantequilla y quesos suaves los puedes colocar en la sección de lácteos de la puerta de tu refrigerador o en un contenedor, en el cajón de carnes frías.
En cuanto a las frutas y verduras, es importante colocarlas en el cajón correspondiente (cajón de frutas y verduras) para mantenerlas frescas el mayor tiempo posible. Estas se mantienen mejor en un ambiente húmedo.
Ahora que sabes cómo almacenar alimentos frescos y preparados, ¿qué sucede con el resto de tus alimentos?
Los condimentos, aceites y jugos pasteurizados pueden ser guardados en las puertas del refrigerador, a pesar de que es una zona menos fría, estos artículos conservaran su frescura.
Si los jugos están recién exprimidos, colócalos en las parrillas inferiores, de esta manera el proceso de fermentación será más lento.